que parecería a ojos inexpertos mustia y deslucida porque nació entre guijarros en las peores circunstancias entre tu aliento y el mío en el desierto de la imposibilidad No pudo ser criada entre los mimos y algodones del amor permitido Y sin embargo... Nuestra planta que nació efímera y quebradiza deja atrás las mil debilidades de la duda brilla sana y crece fuerte. Se hace perenne.