domingo, 13 de septiembre de 2015

Oro de ley

Nos reconocimos enseguida.
Pero erguimos los hombros
en un desafío de fingida indiferencia.
Invencibles solitarios 
creyéndose dueños de sus pasiones
probamos a arrastrar la mirada 
por el cuerpo del deseo.
Héroes originales
incapaces de dominar 
ni la razón ni el corazón,
nos atamos los ojos
con un débil lazo invisible 
Los héroes invencibles
convierten, a menudo, 
débiles lazos invisibles
en oro de ley.

Es nuestro aniversario.
Todo vivo en este amor.


domingo, 6 de septiembre de 2015

El jarrón curioso.

Yo tenía un jarrón de Limoges, que en los vaivenes de una tarde de post- verano reventó de curiosidad. 
Le advertí que no se moviese, que era frágil. 

Pero el pobrecillo se acercó titubeando al borde de estantería a observar el terremoto que se desarrollaba en el sofá  y se vino a estrellar dulcemente a unos centímetros de mis gemidos...

Yo tenía un jarrón de Limoges que murió de amor y de deseo...