"¡No hagas eso!"
"¡No hagas eso!"
No quiere que muerda su oreja,
ni su cuello,
no quiere que chupe sus labios,
ni su lengua.
Sobre todo no quiere que esta noche vuelva a morder lo que es mío.
Esta noche no quiere mordiscos salvajes
ni caricias de polvo de talco.
¡Ay, cómo sois! Y todo por no afeitarse...
ResponderEliminarDespués quereis que nuestra depilación sea perfecta, que no tengamos arrugas y que estemos siempre dispuestas...
¡Un saludo!
Mierda, qué fijación con los pezones, se los va a gastar, particularmente soy más del Clitor, del Gran Clitor, así, como si fuera uno de los tantos guerreros que estuvieron en Troya, pues me sabe mejor.
ResponderEliminarUn saludo afectuoso.
Humberto.
Me ha encantado tu página, he leido con detenimiento varios escritos que has colgado y tienen mucha calidad,te seguiré y garcias por darme esa oportunidad de seguirte...un saludo
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