miércoles, 22 de junio de 2011

Yo tenía un jarrón de Limoges...


Yo tenía un jarrón de Limoges, que en los vaivenes de una tarde de verano reventó de curiosidad. Le advertí que no se moviese, que era frágil. 
Pero el pobrecillo se acercó titubeando al borde de estantería a observar el terremoto que se desarrollaba en el sofá  y se vino a estrellar dulcemente a unos centímetros de mis gemidos...
Yo tenía un jarrón de Limoges que murió de amor y de deseo...



9 comentarios:

  1. Bonita manera de deshacerse de los regalos que no te gustan... Ains! Pena de hombres... No podías decir simplemente "No me gusta demasiado"
    Besote

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  2. Las palabras más bonitas para poner en un blog Esperame. uN beso azul

    Y perderme el placer de hacerlo a mi manera?
    Un beso rojito Kami

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  3. jajajja que hambre me ha dado aunque no sé que coño pinta el jarroncito..º!*

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  4. Bienvenida a nuestro blog Lou. Un placer.

    El jarroncito (feísimo) me lo había regalado ella... y no sabía como deshacerme de él... Ahora está en el contenedor al lado de los trozos de plato roto...jeje
    Me gusta que los planes funcionen...
    Un beso.

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  5. Dices las cosas a tu manera, y eso hace a este blog diferente, me gustó...
    Un beso.
    Humberto.

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  6. Gracias Humberto. Me gusta lo de diferente...No está mal ser diferente no? :)
    Un saludo

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  7. te sigo XD
    me quede :O con el relato

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  8. Bienvenido Damian. Yo también me quedo a veces :O con estos relatos.
    Un saludo

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